Ancho de banda empresarial
El imparable aumento de las necesidades de ancho de banda
Actualmente vivimos de lleno una era de transformación digital en la que cada vez más actividades dejan de producirse de forma local y se trasladan a la nube. Esto está alterando los ritmos y los procesos de producción de miles de empresas a lo largo del mundo, pero también hace que las necesidades de ancho de banda de las compañías aumenten considerablemente.
Es por eso que los actuales límites en el uso de ancho de banda se van ampliando y diluyendo poco a poco, pero de forma inexorable, para hacer sitio a la innovación que nos llega mediante la aplicación de nuevas tecnologías.
Además, según el porcentaje de la población conectada a internet y el número de dispositivos capaces de conectarse a la red aumenta, las necesidades de ancho de banda a nivel global no hacen más que incrementarse año tras año. Por ello, la optimización del uso del ancho de banda cobra una relevancia nunca antes vista.
La transferencia de datos se espera, por parte del usuario, siempre inmediata y sin retardo, mientras el tamaño de los archivos continúa incrementándose. Se trata de archivos cada vez más pesados y alojados en servidores remotos a los que debe ser posible acceder desde distintos usuarios simultáneamente. Eso exige soluciones inéditas en lo que al ancho de banda se refiere.
El streaming no es una moda pasajera y ha llegado para quedarse, puesto que las facilidades que aporta sobrepasan cualquier dificultad que las conexiones del pasado pudieran ofrecer. Nadie quiere descargar archivos de gran tamaño para acceder a ellos cuando puede trabajar de la misma manera utilizando la nube.
Contratar el ancho de banda necesario puede ser complicado debido a las necesidades cambiantes del mercado actual y es siempre útil ofrecer soluciones que permitan a los usuarios adaptar su facturación al uso que dan de su conexión. Además, los clientes esperan poder gestionar los cambios de la conectividad contratada sin tener que esperar días en que sean efectivo.
Las soluciones escalables son la respuesta idónea a estas tendencias del mercado, permitiendo a las compañías modificar el ancho de banda disponible al momento para ajustarse a sus ritmos actuales de facturación sin penalizaciones económicas.
Todas estas necesidades de usuarios y empresas exigen una inversión en infraestructuras constante para mantener el ritmo que marcan las nuevas formas de trabajo. Las necesidades de ancho de banda no han tocado techo, ni mucho menos, y seguirán sin duda incrementándose en el futuro próximo.